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La OSCyL participa en la Semana Internacional de Música de Medina del Campo

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Fecha de publicación:

21 de febrero de 2016

Fuente:

Consejería de Cultura, Turismo y Deportes

Descripción:

En el marco de la 26 Semana Internacional de la Música de Medina del Campo, este próximo domingo día 5 de noviembre, a las 20:30 horas, en su Auditorio Municipal, la Orquesta Sinfónica de Castilla y León ofrece un concierto, bajo la dirección de Damián Iorio: "Música e imagen".

Contenido:

MÚSICA E IMAGEN

Se trata de un concierto que, como bien indica su nombre, concilia música e imagen, ya que la OSCyL interpretará la música original que Dimitri Shostakovich compuso para el filme LA NUEVA BABILONIA (1929) de Grigori Kotzintsev, mientras que se proyectará simultáneamente la película. 

Director: DAMIÁN IORIO
Música original de Dimitri Shostakovich para el filme LA NUEVA BABILONIA (1929) de Grigori Kotzintsev, con la proyección simultanea de la película.

Intérpretes: OSCYL. La Orquesta Sinfónica de Castilla y León (OSCyL) fue creada en 1991 por la Junta de Castilla y León, y tiene su sede estable desde 2007 en el Centro Cultural Miguel Delibes de Valladolid. Su primer director titular fue Max Bragado-Darman y, tras este periodo inicial, Alejandro Posada asumió la titularidad de la dirección durante siete años, hasta la llegada de Lionel Bringuier, quien permaneció al frente hasta junio de 2012. Desde ese año cuenta con el maestro toresano Jesús López Cobos como director emérito. En la temporada 2015-2016 Eliahu Inbal fué designado principal director invitado, con lo que entró a formar parte del equipo de la OSCyL . Desde la temporada 2016 la OSCYL cuenta con el director Andrew Gourlay como titular y sigue contando con Jesús López Cobos como director emérito.
A lo largo de más de dos décadas, la OSCyL ha ofrecido centenares de conciertos junto a una larga lista de directores y solistas, entre los que han destacado los maestros Semyon Bychkov, Rafael Frühbeck de Burgos, Gianandrea Noseda, Masaaki Suzuki, Ton Koopman, Josep Pons, David Afkham o Leopold Hager; los cantantes Ian Bostridge, Angela Denoke, Juan Diego Flórez, Magdalena Kozena, Leo Nucci, Renée Fleming o Angela Gheorghiu; e instrumentistas como Vilde Frang, Daniel Barenboim, Xavier de Maistre, Emmanuel Pahud, Gordan Nikolic, Viktoria Mullova, Mischa Maisky o Hilary Hahn, entre otros muchos.
Durante sus veinticinco años de trayectoria, la OSCyL ha llevado a cabo importantes estrenos y ha realizado diversas grabaciones discográficas para Deutsche Grammophon, Bis, Naxos, Tritó o Verso entre otras, con obras de compositores como Joaquín Rodrigo, Dmitri Shostakóvich, Joaquín Turina, Tomás Bretón, Osvaldo Golijov o Alberto Ginastera. Además, ha llevado a cabo una intensa actividad artística en el extranjero, con giras por Europa y América, que le han permitido actuar en salas tan destacadas como el Carnegie Hall de Nueva York.
Algunos de los compromisos para la presente temporada 2017-2018 incluyen una gira por Francia y otra por Portugal; actuaciones con los maestros Jean Crhistophe Spinosi, Lionel Bringuier, Semyon Bychkov, Vasily Petrenko entre otros y solistas como Vadim Repin, Maria Joao Pires, Nicolai Lugansky o Javier Perianes entre otros.
Es importante reseñar la alta implicación de la orquesta en las numerosas iniciativas sociales y educativas que el Centro Cultural Miguel Delibes está llevando a cabo, como el proyecto “In Crescendo”. La actividad de la OSCyL llega a más de 70 centros escolares y a 70.000 niños a través de talleres, conciertos especialmente diseñados para alumnos de la ESO y otras actividades, por ejemplo en centros para niños con necesidades especiales. Asimismo cabe destacar la versatilidad de la formación, que se pone de manifiesto en la participación de ensembles y agrupaciones de cámara en los ciclos de programación propia.


DAMIÁN IORIO
Director italiano nacido en Londres, Damian Iorio, se crió en una distinguida familia de músicos italianos e ingleses. Después de estudiar en el Reino Unido y los EEUU, comenzó su carrera musical como violinista, estudió dirección de orquesta en St. Petersburgo. Damian ha trabajado con una impresionante lista de orquestas y compañías de ópera incluyendo la Filarmónica de Londres, el Glyndebourne Festival Opera, la Sinfónica de Detroit, la Sinfónica de San Francisco, la Ópera Nacional de París, la Filarmónica de los Países Bajos, la Filarmónica de San Petersburgo, la BBC Symphony, Oper Bonn y la Orquesta Nacional de Bélgica. y la Orquesta de Chambre de Lausanne.
Damian Iorio ha regresado recientemente a la Filarmónica de Londres, la Orquesta Sinfónica de Lahti y la Orquesta Nacional de Bélgica y ha debutado con la Royal Philharmonic Orchestra, la Royal Liverpool Philharmonic y la BBC National Orchestra de Gales.
Damián Iorio ha dirigido el "Macbeth" de Verdi en el Glyndebourne Festival Opera y "The Bartered Bride" de Smetana en la Ópera Nacional de París donde vuelve en 2018 para "Boris Godunov". Los recientes debuts exitosos con Helikon Opera en Moscú ("Carmen") y Norrlands Opera en Suecia ("Eugene Onegin") han llevado a una fuerte relación con ambas compañías. Hizo su debut en Estados Unidos con Central City Opera en Colorado en Britten "The Rape of Lucretia", que fue admirado por la prensa internacional. Ha aparecido en la ópera de Bonn para una producción de "Turandot" de Puccini, condujo la ópera noruega varias veces y también muchos centros de ópera italianos incluyendo el teatro Regio di Torino. En San Petersburgo dirigió "The Turn of the Screw" de Britten y en Moscú el estreno en ruso de Michael Nyman, "El hombre que confundió a su esposa con un sombrero", nominado a la mejor producción de ópera en el Golden Mask Festival.
Su reciente grabación de Ghedini y Casella en Naxos ha sido apreciada por The Guardian y fue galardonada con el prestigioso “Choc” de Le Monde de la Musique. Su interés en la creación de música nueva lo ha llevado a realizar varios estrenos, colaborando estrechamente con compositores como Tan Dun, Huw Watkins, Silvia Colasanti y Michael Nyman.
Damian Iorio fue Director Artístico de la Orquesta Filarmónica de Murmansk, donde fue catalizador de su éxito y crecimiento en la ópera y el concierto.
Le gusta trabajar con jóvenes músicos y actualmente es Director Musical de la Orquesta Nacional de Cuerdas Juveniles de Gran Bretaña. En 2014 se convirtió en Director de Música de la Orquesta de la Ciudad de Milton Keynes, que está construyendo una fuerte reputación como parte central de la vida cultural en la región y la ciudad.
En 2006 recibió al Caballero de la Orden de Sant'Agata de la República de San Marino en reconocimiento por sus servicios a la música.

En el año de 1870, en pleno auge de la guerra Franco-Prusiana, el desarrollo del conflicto bélico dio lugar a que las tropas de Prusia avanzaran sobre la capital francesa. Ante la inminente invasión de París, el gobierno francés se apresuró a pedir una tregua, lo que pronto dio lugar a la capitulación total. El orgulloso pueblo francés, avergonzado por la pusilánime reacción del gobierno, se alzó enfurecido. El gobierno sustituto, la Comuna, duró menos de dos meses en el poder, y sus líderes fueron prontamente fusilados. Con estos hechos como referencia, los cineastas rusos Grigori Kozintsev y Leonid Trauberg concibieron un filme en el que siguieron un procedimiento bastante común: el narrar un hecho de importancia histórica universal a través de la visión de personajes individuales. En el caso del filme de Kozintsev y Trauberg, el personaje principal es Louise Poirier, dependienta de la tienda parisina que da su nombre al filme, La Nueva Babilonia. Es a través de la mirada y las percepciones de Louise (interpretada por Yelena Kuzmina) que los cineastas narran esta historia, que es a la vez una presentación de hechos y una toma de posición frente a ellos. En este caso, esa posición está claramente anclada en la lucha de clases.
“Nueva Babilon” es una película soviética dirigida por Grigori Kozintsev y Leonid Trauberg. La película, esta basada en un acontecimiento histórico, sobre el que se asienta todo un entramado ideológico. Al igual que en otros filmes soviéticos, la intención era la de dar a conocer los nuevos valores de la revolución soviética. El argumento se sitúa en 1870, durante la guerra Franco-Prusiana. Después de la derrota francesa, en París se estableció un gobierno que Marx calificó como el primer gobierno socialista de la historia. En poco tiempo fue reprimido por los poderes reaccionarios, desde el sur de Francia. La historia está vista desde una perspectiva contemporánea, y tiene relación con la historia de la revolución soviética. Es una de las últimas películas mudas en las que el lenguaje cinematográfico empleado resulta de gran interés.
La trama se centra en una historia particular, aunque de fondo trata un acontecimiento histórico, como fue La comuna de París. La historia individual es la de una mujer que mantiene una relación amorosa con uno de los soldados. Las mujeres tienen en la película una importancia capital.
El filme nos recuerda de manera evidente al cine del director soviético Einsentein. La película es atrevida y en los momentos más dramáticos destaca por un excelente uso del montaje.
La música es fundamental. La compone Dimitri Shostakovich, uno de los referentes musicales de la primera etapa soviética. La banda sonora no se limita a una música que acompaña la historia, sino que juega un papel experimental de sumo interés. Para empezar, pretende condicionar ideológicamente al espectador, siguiendo la propuesta argumental, lo que se demuestra en la deformación que se realiza sobre el himno nacional francés. La película presenta a los soldados como marionetas en manos de la burguesía. Hay un instante en que uno de los políticos habla en mitin cargado de nacionalismo. En ese momento Shostakovich mezcla las notas del himno francés con las del “can can” de Offenbach, en una burla evidente que el compositor utilizó en muchas ocasiones en sus sinfonías. En definitiva la película utiliza la música para denunciar lo absurdo del nacionalismo, en contraposición con la lucha de clases.
Nos encontramos ante una obra que desafortunadamente es poco conocida y por eso el concierto merecerá la atención de los más cinéfilos. En él disfrutaremos de la unión magistral del mejor cine soviético con la música extraordinaria de Shostakovich.